Rosario García
En la almohada al levantarte, en el desagüe al ducharte, en el cepillo al asearte… siempre están ahí, ¡pelos! Entonces te acuerdas de tus padres, de cómo tu madre empezó a tener el pelo más fino con la edad y tu padre tuvo que comenzar peinarse de forma distinta para disimular lo ya inevitable. Ves fotos de tus abuelos y lo brillante de sus cabezas. No puedes evitarlo, ¡tú también estás condenado a la calvicie! ¿O quizás no?
El lucir una brillante calva tiene indudablemente un factor genético, pero no es el único factor que hay detrás de por qué unas personas dejan sus ideas más aireadas que otras. Hay muchos mitos y leyendas asociados con este fenómeno que tanto puede afectar a la autoestima de una persona por el cambio estético que produce. Es por esta afectación y el gran porcentaje de la población que lo padece por lo que hay o se están desarrollando diferentes fármacos y tratamientos para evitar o frenar la caída del cabello. Incluso, en algunos casos, ¡regenerarlo!
Se distinguen distintos tipos de alopecia dependiendo de los factores que la estén causando, puesto que algunos de estos factores son genéticos y otros son ambientales. En este post hablaremos de la alopecia androgénica, de la alopecia areata y del Efluvio Telógeno y Anágeno.
Alopecia androgénica
Este tipo de alopecia afecta al 31% de la población de entre 40-50 años, y al 53% de los mayores de 65. Se produce tanto en hombres como mujeres. En mujeres la pérdida del cabello no es total y no tiene un patrón específico (el pelo desaparece de forma uniforme en toda la cabellera dando aspecto de tener menos volumen de pelo y más fino) , mientras que en hombres el cabello suele desaparecer en zonas concretas como la coronilla o las “entradas”, pudiendo llegar a la pérdida total del pelo.
El gen responsable de la caída del cabello en este tipo de alopecia, al menos parcialmente, es el gen AR, que codifica para un receptor de andrógenos. Los receptores de andrógenos permiten que el organismo responda bien a hormonas como la testosterona y son muy importantes en el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios durante la pubertad. Además, tienen otras muchas funciones a lo largo de la vida del individuo, como la regulación del mantenimiento y ganancia de masa muscular o la regulación de la líbido.
Hay variantes del gen AR que pueden producir un número aumentado de receptores androgénicos en los folículos pilosos de la cabellera. Por añadido, se ha visto que la testosterona contribuye a la reducción del tamaño y miniaturización de los folículos pilosos. En concreto, la forma de la testosterona metabolizada por la enzima 5α-reductasa: la dihidrotestosterona, que es 10 veces más potente.
Lo que ocurre entonces, es que, al haber más receptores androgénicos a causa de las variantes del gen AR, puede actuar más cantidad de dihidrotestosterona en los alrededores del folículo piloso. Esto es lo que provoca la miniaturización progresiva del folículo piloso, hasta que, finalmente, desaparece.
El proceso por el cual un folículo piloso acaba desapareciendo en este tipo de alopecia, se explica en varios ciclos del crecimiento del cabello. Un pelo pasa por varias fases desde que crece hasta que se cae, pues cierta pérdida del cabello es normal. Después de caerse, la yema que queda forma un nuevo folículo piloso. En el caso de que se haya visto afectado por la dihidrotestosterona, el folículo piloso que formará la yema será más pequeño que el anterior.
Todo esto se ha confirmado mediante el análisis de individuos con variantes del gen AR y variantes menos eficaces del gen para la 5α-reductasa. Los individuos con esta enzima con eficacia reducida presentaban menos pérdida del cabello, ya que menos testosterona se transformaba en dihidrotestosterona, que es más potente. Pese a estos estudios, se ha observado que los fármacos que producen la inhibición de la 5α-reductasa sólo frenan la caída del cabello de manera parcial y no producen regeneración de los folículos pilosos ya perdidos, ni engrosamiento de los ya existentes.
Los individuos que sean fármaco-resistentes a esta medicación, pueden optar al trasplante capilar, o incluso, a tatuajes que imitan un corte de pelo rapado.
Alopecia areata
Este tipo de alopecia sí se trata de una enfermedad y puede tener numerosas causas (multifactorial), aunque se considera principalmente un proceso autoinmune con cierto factor genético, ya que en el 30% de los casos diagnosticados hay antecedentes familiares.
Se caracteriza por la pérdida del pelo en placas o zonas circulares, tanto en el cuero cabelludo como en el resto del cuerpo. Puede aparecer en cualquier momento de la vida, aunque suele ser más frecuente en niños.
El proceso autoinmune se da por la presencia de linfocitos T CD8, un tipo de glóbulos blancos, cerca o alrededor de los folículos pilosos que conforman la placa circular.
Tiene, además, varias formas clínicas: ofiásica (calvas localizadas en la línea del cabello), total (afecta a todo el cuero cabelludo) y universal (afecta a todo el pelo del cuerpo).
Para esta enfermedad hay diversos tratamientos farmacológicos, aunque la mayoría implica la cronificación del tratamiento y suelen tener ciertos efectos secundarios a largo plazo.
Efluvio Telógeno y Efluvio Anágeno
Este tipo de calvicie está relacionada con la frecuencia y el estado de los ciclos por los que pasa el folículo piloso. La frecuencia de los ciclos de crecimiento del folículo piloso se ve afectada, en este caso, por factores ambientales, en vez de, factores genéticos.
Dentro de cada ciclo, un folículo piloso pasa por tres fases: la de crecimiento (anágena), la de reposo (catágena) y la de caída (telógena). Estas fases se repiten una tras otra de forma cíclica.
En la alopecia por Efluvio telógeno, la mayoría de los folículos pilosos se aceleran y se sincronizan, entrando en fase telógena a la vez, de forma que se produce la caída de bastante cantidad de pelo en relativo poco tiempo.
El Efluvio Telógeno puede estar causado por multitud de factores, entre ellos las deficiencias nutricionales y trastornos relacionados (ej. Vitaminas, proteínas, anemia, etc.), alteraciones del sistema endocrino, situaciones de estrés agudo o algunos fármacos.
En el caso del Efluvio Telógeno, el pelo vuelve a crecer tras unos meses después de interrumpir el factor o factores que lo estaban causando, por lo que, por lo general no suele ser necesario un tratamiento farmacológico.
Por otra parte, el Efluvio Anágeno sucede porque los folículos pilosos en fase anágena ven interrumpido su desarrollo y entran de forma brusca en fase telógena. Las causas del Efluvio Anágeno son las mismas o similares a las del Efluvio Telógeno. Sin embargo, una de las principales causas del Efluvio Anágeno son la gran mayoría de fármacos anticancerosos, y este tipo de efluvio es ampliamente reconocido como uno de sus efectos adversos.
Al igual que Efluvio Telógeno, el cabello se recupera a los pocos meses de interrumpir la causa principal, cuando los folículos pilosos se renuevan y crecen de nuevo. Es raro que el Efluvio Anágeno termine en una alopecia total y permanente.
***
La alopecia, en todos sus tipos y variantes, es algo que puede afectar a todo el mundo en diferentes fases de la vida y por diversas causas, algunas de ellas, meramente genéticas. Así, la calvicie no es algo por lo que acomplejarse, afecta a gran parte de la población y más allá de gustos estéticos, no produce ningún problema o afección grave a la salud.
¡Nos vemos en otro post!
Referencias
Luis A. Garza, Bald scalp in men with androgenetic alopecia retains hair follicle stem cells but lacks CD200-rich and CD34-positive hair follicle progenitor cells. (2011) J Clin Invest. Volume 121, issue 2, pages 613-622 https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3026732/
Yi-Chien Yang, Androgen Receptor Accelerates Premature Senescence of Human Dermal Papilla Cells in Association with DNA Damage. (2013) PLoS One. Volume 8, issue 11 https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3828374/
Genetics Home Reference. Androgenetic Alopecia. https://ghr.nlm.nih.gov/condition/androgenetic-alopecia
Fundación Piel Sana de la AEDV. Efluvio telógeno. https://fundacionpielsana.es/wikiderma/efluvio-telogeno
Academia Española de Dermatología y Venerología (AEDV). Alopecia Areata. https://web.archive.org/web/20130320004608/http://aedv.es/enfermedades/pdf/alopecia_areata.pdf
Dres. E. Herrera, M.V. Mendiola y A. Matilla. Alopecia Areata. Dermatología: Correlación clínico-patológica . Pages 33-35. https://web.archive.org/web/20130626013235/http://www.e-dermatosis.com/pdf-zip/Derma005.pdf