La percepción de aislamiento social puede actuar sobre la salud humana

Amparo Tolosa, Genética Médica News

 

Un estudio en adultos de edad avanzada revela que el sentimiento de soledad activa una respuesta fisiológica que puede causar enfermedad. Imagen: Joan Sorolla. CC BY 2.0 (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0/).
Un estudio en adultos de edad avanzada revela que el sentimiento de soledad activa una respuesta fisiológica que puede causar enfermedad. Imagen: Joan Sorolla. CC BY 2.0 (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0/).

El sentimiento de soledad activa una respuesta fisiológica que puede causar enfermedad. Así lo indica un reciente trabajo dirigido por la Universidad de Chicago recientemente publicado en la revista PNAS.

En los últimos años, diferentes estudios han reconocido el sentimiento o percepción de aislamiento social como un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedad crónica o aumento de la mortalidad. Sin embargo, los mecanismos moleculares que intervienen en dicho riesgo, permanecían sin identificar.

El trabajo, dirigido por John Cacioppo, revela que las personas que se sienten aisladas socialmente de forma crónica muestran una alteración de las poblaciones celulares sanguíneas de la línea mieloide que activa una respuesta molecular caracterizada por la activación de genes que inducen inflamación y reducción de la de aquellos que intervienen en contra de las infecciones víricas.

Para llegar a esas conclusiones, los investigadores analizaron de forma repetida la expresión génica en las células obtenidas de sangre periférica de 121 participantes en un estudio de salud. En el 26% de los participantes que presentaban de forma crónica, el equipo había encontrado mayores niveles de estrés y síntomas de depresión, así como un menor apoyo social. En este grupo, se identificó un programa específico de expresión génica en las células sanguíneas, denominado respuesta transcripcional conservada ante la adversidad, en el que se observaba una activación de genes relacionados con respuestas inflamatorias y una reducción de genes asociados a la respuesta inmune antiviral mediada por el interferón g. Esto significa que las personas que desarrollan un sentimiento elevado de soledad experimentan una mayor inflamación y una menor respuesta inmune que aquellas que no se sienten aisladas socialmente.

Los investigadores detectaron que los cambios de expresión observados en las células sanguíneas de las personas con percepción de soledad están mediados por la expansión selectiva de un tipo celular concreto, los monocitos inmaduros. Estos resultados fueron confirmados en un modelo en macaco, especie sensible al aislamiento social, en el que también observaron que los animales aislados muestran niveles elevados de neuroepinefrina, un neurotransmisor que puede estimular a las células de la médula ósea a producir más monocitos inmaduros.

Los cambios de expresión observados en las células sanguíneas de las personas con percepción de soledad están mediados por la expansión selectiva de monocitos inmaduros. Imagen derivada de: Blausen.com staff. "Blausen gallery 2014". Wikiversity Journal of Medicine. DOI:10.15347/wjm/2014.010. ISSN 20018762. [CC BY 3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by/3.0)].
Los cambios de expresión observados en las células sanguíneas de las personas con percepción de soledad están mediados por la expansión selectiva de monocitos inmaduros. Imagen derivada de: Blausen.com staff. “Blausen gallery 2014”. Wikiversity Journal of Medicine. DOI:10.15347/wjm/2014.010. ISSN 20018762. [CC BY 3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by/3.0)].
No sólo los individuos con percepción crónica de aislamiento social mostraban un programa diferente de expresión génica en las células sanguíneas, sino que además, la presencia del programa de expresión predecía la aparición de sentimientos de aislamiento, lo que apunta a una interacción entre la percepción social y los patrones de expresión génica asociados a los procesos inflamatorios. Los investigadores sugieren que la participación de los monocitos inmaduros ofrece un mecanismo para esta interacción debido a que este tipo celular puede circular por el cerebro, donde podrían promover ansiedad y alterar el comportamiento social. Igualmente, las moléculas de señalización denominadas citoquinas proinflamatorias pueden circular por el cerebro y activar procesos que amplifiquen el sentimiento de aislamiento.

Los autores del trabajo proponen un modelo en el que la percepción crónica de una amenaza social, de aislamiento, altera la producción de células del linaje mieloide y aumenta el número de células inmaduras relacionadas con respuesta inflamatoria y defectivas para la señalización mediada por interferón.

Los resultados del trabajo muestran cómo la percepción de la soledad, algo frecuente en muchas personas mayores, puede actuar sobre diferentes procesos biológicos e influir sobre sobre la salud humana. Además, concluyen los autores, proporcionan un marco de trabajo en el que estudiar las interacciones entre la percepción social y otras características fisiológicas como la función inmune o actividad neural.

Referencia: Cole SW, et al. Myeloid differentiation architecture of leukocyte transcriptome dynamics in perceived social isolation. PNAS. 2015. Doi:   10.1073/pnas.1514249112

Fuente: Loneliness triggers cellular changes that can cause illness, study shows. University of Chicago. http://news.uchicago.edu/article/2015/11/23/loneliness-triggers-cellular-changes-can-cause-illness-study-shows

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