40.000 expertos abordan las novedades sobre oncología en ASCO 2018

Lucía Márquez Martínez, Genética Médica News

 

Alrededor de 40.000 especialistas en cáncer se reunieron la semana pasada en Chicago para celebrar la 54º Reunión de la Sociedad Americana de Oncología Médica (ASCO por sus siglas en inglés) que en 2018 ha contado con el lema Aplicar los descubrimientos: Expandir el alcance de la medicina de precisión. En este sentido, el presidente de ASCO, Bruce E. Johnson indicó que la potencialidad de este tipo de enfoques clínicos “depende de nuestra capacidad de lograr que estos tratamientos estén disponibles para todos los pacientes”. La otra gran línea de trabajo que ha brillado en ASCO 2018 es la inmunoterapia, que revalida su papel como estrella del encuentro dando así continuidad a una tendencia que ya quedo más que establecida en la cita de 2017. Además, lo hace mostrando su faceta más versátil y transversal, su capacidad de adaptación a distintos pronósticos y entornos derivados de la enfermedad.

 

En 2018 la reunión de la Sociedad Americana de Oncología Médica ha contado con el lema “Aplicar los descubrimientos: Expandir el alcance de la medicina de precisión”. Imagen: ASCO/Rodney White 2018.

 

Cáncer de pulmón

Si hablamos de tipos de cáncer, el de pulmón ha sido uno de los que mayor protagonismo ha experimentado en este encuentro ya que ha centrado numerosos de los estudios y ensayos clínicos presentados. Por ejemplo, el Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) mostró en Chicago varias investigaciones que abordan la eficacia de distintos acercamientos farmacológicos en cáncer de pulmón avanzado. Así, el estudio Nadim analizó los beneficios de la quimioterapia e inmunoterapia antes de la cirugía mientras que el GOAL se centró en los resultados de combinar gefitinib y olaparib frente a emplear únicamente gefitinib en pacientes con mutación del gen EGFR.

Otro de los estudios relacionados con cáncer de pulmón es KEYNOTE-042, patrocinado por MSD. Este trabajo concluyó que la administración de inmunoterapia con pembrolizumab constituye un mejor tratamiento inicial que la quimioterapia para el cáncer de pulmón más común. En concreto, los pacientes que recibieron el inmunoterápico no solamente lograron sobrevivir una mediana de entre cuatro y ocho meses más que los que recibieron quimioterapia, sino que además presentaron menos prevalencia de efectos secundarios graves.

En la misma línea, encontramos el estudio fase III IMpower131, que mostró cómo la suma de atezolizumab y quimioterapia (carboplatino y Abraxane) reduce el riesgo de progresión de la enfermedad e incluso la mortalidad un 29% comparado con solamente quimioterapia como tratamiento inicial en pacientes con CPNM escamoso en fase avanzada. Igualmente, el ensayo en fase 2 Visión indicó que la terapia en investigación con teponitib (Merck) mostraba actividad clínica en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) avanzado que presentan alteraciones por omisión del exón 14 de MET. Según explicaron los responsables de esta iniciativa, el tratamiento con tepotinib condujo a una respuesta completa (RC) confirmada o una respuesta parcial (RP) confirmada en el 53,6% de los casos y enfermedad estable (EE) en casi el 18%. Al evaluar de forma independiente los datos actualizados de 28 pacientes, se descubrió que aproximadamente el 43% de los individuos presentó una RP confirmada y el 21,4% una EE.

Cáncer de mama

ASCO 2018
Exposición de posters durante el congreso ASCO 2018. Imagen: ASCO/Scott Morgan.

En cuanto al cáncer de mama, cabe destacar el estudio PERSEPHONE, llevado a cabo por la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y encargado de analizar la posibilidad de reducir a seis meses el tratamiento habitual de un año con la terapia dirigida trastuzumab, un tratamiento que ha mostrado gran eficacia en mujeres con cáncer de mama que sobreexpresan la proteína Her2. Tras cuatro años de seguimiento, el 89,4% de las pacientes que tomaron el tratamiento durante seis meses estaban vivas frente al 89,8% que lo habían recibido durante un año. El acortamiento en el periodo de terapia permitiría reducir el riesgo cardiovascular que a menudo aparece entre los efectos secundarios de estos tratamientos. En concreto, este trabajo se basa en un ensayo clínico aleatorizado en fase III sobre más de 4.000 mujeres.

ASCO 2018 también acogió los resultados del ensayo clínico TAILORx, que contó con más de 10.000 mujeres con cáncer de mama HER2 sin afectación de ganglios linfáticos, el más común dentro de este tipo de cáncer. Tras diversos años de terapia, la conclusión principal fue que el tratamiento hormonal por si solo no resultó menos exitoso que la combinación con quimioterapia. En cualquier caso, el trabajo descubrió que las pacientes de 50 años o menos con una puntuación de recurrencia de entre 16 y 25 puntos sí podrían beneficiarse de la combinación con quimioterapia. Alrededor del 83 % de las mujeres que recibieron solo terapia hormonal quedaron libres de cáncer en comparación con alrededor del 84 % de aquellas que recibieron terapia hormonal más quimioterapia.

Cáncer de páncreas

Respecto al con cáncer pancreático, debemos nombrar el ensayo Prodige 21/ CCTG. Este trabajo reclutó a pacientes franceses y canadienses con adenocarcinoma ductal pancreático no metastásico (PDAC) que fueron sometidos a cirugía con el objetivo de extirpar la mayor parte posible del tumor. Tras la operación, los sujetos que recibieron Folfirinox (oxaliplatino, leucovorina, irinotecán y y 5-fluorouracilo) presentaron una supervivencia con una mediana 20 meses superior a quienes se les administró la actual terapia estándar consistente en gemcitabina.

Por otra parte, el ensayo clínico ensayo PREOPANC-1 demostró que las personas con cáncer de páncreas que recibieron quimioterapia con gemcitabina (Gemzar) y radioterapia antes de la cirugía vivieron más tiempo que aquellos que no lo hicieron. Los 246 participantes padecían cáncer pancreático que podía ser extirpardo quirúrgicamente. Se les dividió de forma aleatoria en dos grupos: a uno de ellos se le realizó la cirugía primero, mientras que el segundo grupo recibió quimioterapia en combinación con radioterapia durante 10 semanas antes de la cirugía. Tras la cirugía, se asignó quimioterapia a ambos colectivos. Los responsables de la investigación señalaron que aquellos que recibieron quimioterapia en combinación con radioterapia antes de la cirugía tuvieron una mediana la supervivencia general cerca de 3 meses mayor que aquellos que no lo hicieron.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir chat