Una revisión sobre Sociología y Genética abre la era de la Sociogenómica
Sofía Martínez-Morales y Manuel Pérez-Alonso

Los pioneros de la genética social eran racistas y defensores de la eugenesia: ¿deberíamos renunciar por completo a la ciencia que ellos fundaron? Estas son palabras de Kathryn P. Harden, profesora del Departamento de Psicología en la Universidad de Texas en un artículo publicado en la revista AEON. La respuesta a esta intrigante pregunta es clara y nos la dan los autores del artículo que ahora se va a tratar: no debemos renunciar a la genética social.

Melinda C. Mills, investigadora vinculada al Departamento de Sociología de la Universidad de Oxford, junto con Felix C. Tropf, investigador afiliado a la École Nationale de la Statistique et de L´administration Économique son los autores del artículo de revisión publicado en la revista Annual Review of Sociology que discutimos aquí.

La revisión que presentan tiene una importancia incuestionable. En ella muestran de qué manera la genética puede ser introducida y utilizada para entender múltiples cuestiones, tales como la fertilidad, el éxito educativo, la movilidad social intergeneracional, el bienestar, las adicciones, los comportamientos de riesgo y la longevidad. Para estudiar esta relación entre la genética y las cuestiones mencionadas, los autores hacen referencia a diferentes artículos e investigaciones publicados recientemente.

El artículo está estructurado de tal forma que, primeramente, sitúa a los lectores a nivel histórico y teórico, explicando la trayectoria que ha tenido la investigación en la genética del comportamiento. Avanzando en el documento, se muestra una revisión profunda sobre el punto en el que nos encontramos en cuanto al conocimiento y la investigación, en lo que se refiere a la aplicación de la genética en diferentes aspectos de la sociología.

Otro objetivo de revisión es aclarar la forma en la que los sociólogos pueden aplicar los descubrimientos de la genética en su campo de investigación. La aplicación más interesante para los sociólogos es la de los PGSs (indíces de riesgo poligénico) derivados de la suma de estadística de los descubrimientos de los GWAS (Genome-Wide Association Study). Estos estudios GWAS permiten identificar variantes genómicas asociadas estadísticamente con un rasgo determinado; en este caso los rasgos que mencionan son de interés sociológico.

A lo largo de la revisión se puede observar que ésta tiene una marcada tendencia práctica, aportando herramientas para desarrollar la sociogenómica. También aporta soluciones a los diferentes problemas y retos que plantea la genética social. Los autores definen su artículo como una revisión crítica. Así mismo, se cuestionan el rumbo que debemos tomar, haciendo especial énfasis en los riesgos y los peligros del mal uso de la genética aplicada a la sociología.

Finalmente, concluyen con una crítica reflexiva sobre la falta de diversidad, sobre las muestras no representativas y sobre la aplicación de políticas de precisión, al preguntarse: ¿puede la genética ser usada para desarrollar medidas políticas de precisión? (Can genetics be used to develop precision policy measures?). En la parte final de esta revisión también reflexionan sobre la ética, los riesgos en la privacidad y el determinismo genético.

La sociogenómica, como tema vertebral del artículo, es una ciencia emergente que combina la genética y la sociología. Esta nueva ciencia tiene entre sus objetivos el análisis de cuestiones sociológicas, como las presentadas en la revisión. Dichas cuestiones, a pesar de tener un largo recorrido en la historia de las ciencias sociales, todavía no han sido resueltas satisfactoriamente. Con este motivo, la genómica social puede resultar de ayuda al facilitar el desarrollo de teorías, medidas y metodologías innovadoras en la investigación de la genética aplicada a las ciencias sociales.

La posibilidad de que la sociogenómica sea un éxito (para resolver cuestiones sociológicas y mejorar la investigación en ciencias sociales) aumenta de forma paralela con la preocupación sobre el posible mal uso de los datos genéticos. Los dilemas éticos que se derivan de la aplicación de la genética en las ciencias sociales llevan siendo discutidos durante décadas y ahora, nuevamente, se ponen de manifiesto.

En relación con esta discusión ética, recientemente se ha publicado en la revista Genética Médica News el artículo titulado “Debate sobre la ética de la genómica y la genética en las ciencias sociales y el estudio del comportamiento”. Este artículo informa sobre un encuentro online, organizado por el National Human Genome Research Institute (NHGRI), de gran trascendencia para el ámbito de la genómica social. En dicho evento se reflexiona de la mano de científicos preocupados por el mal uso de la ciencia, así como las implicaciones éticas y científicas de la genética aplicada a los aspectos de la vida social.

La preocupación sobre el mal uso de los descubrimientos genéticos en el área de las ciencias sociales se acentúa debido a los grandes avances científicos de la genética, que han tenido lugar en los últimos años. Entre los avances más destacados se encuentran los siguientes: el abaratamiento de los costes en la secuenciación del genoma, la explosión sin precedentes de datos genéticos, la entrada en la era del big data, la ampliación de los y el surgimiento de los estudios de riesgo poligénico.

A esta inquietud se suma el hecho de que la genética todavía no ha sido descubierta por la mayor parte de las sociólogas y los sociólogos. Sin embargo, según expresan los autores, a la genética social, también llamada sociogenómica, le espera un futuro prometedor. Este es un nuevo campo que tiene el potencial de cambiar el tipo de datos que se están recogiendo en la investigación en ciencias sociales. En definitiva, la sociogenómica afectará la forma en qué los sociólogos y sociólogas llevarán a cabo su trabajo.

En sus conclusiones, los autores se dirigen directamente hacia los sociólogos, haciendo un claro llamamiento para que dejen de ignorar la aplicación de la genética en sus investigaciones. También manifiestan que la genética necesita un pensamiento sociológico. Todo ello supone un reto en el que la sociología debe decidir si va a participar, de manera activa, desarrollando conjuntamente con los genetistas nuevas teorías, métodos, datos y hallazgos. La alternativa que queda es mantenerse al margen y observar cómo otras disciplinas estudian sus temas centrales.

Bibliografía

Mills MC y Tropf FC (2020). Sociology, Genetics, and the Coming of Age of Sociogenomics. Annual Review of Sociology 46: 553-581.DOI: https://doi.org/10.1146/annurev-soc-121919-054756

Harden KP (2021). The science of terrible men. AEON. 11 marzo, 2021. Recuperado de: https://aeon.co/essays/what-do-we-do-with-the-science-of-terrible-men

Martínez-Morales S, Pérez-Alonso M y García Anaya A (2023). Debate sobre la ética de la genómica en las ciencias sociales. Genética Médica News. Número 224 (publicado el 25 de enero, 2023).https://genotipia.com/genetica_medica_news/debate-sobre-la-etica-de-la-genomica-y-la-genetica-en-las-ciencias-sociales/

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