Rubén Megía González, Genotipia
Un grupo de investigadores de diferentes instituciones francesas ha relacionado un gen con el rechazo a trasplantes renales en humanos. El gen, que forma parte del Complejo Mayor de Histocompatibilidad (CMH), podría ayudar a predecir de forma más eficaz la probabilidad de rechazo en pacientes que necesiten un trasplante renal.
El trasplante de riñón es considerado una de las mejores opciones para pacientes con enfermedades renales en etapa terminal. Sin embargo, siempre existe cierta probabilidad de rechazo, lo que, en ciertos casos, puede poner en riesgo la vida del paciente. Por este motivo, en la actualidad, los profesionales sanitarios tienen en cuenta diferentes parámetros inmunológicos y genéticos que pueden alterar la probabilidad de rechazo del trasplante renal.
Ahora, los resultados de un estudio publicado el pasado 14 de marzo en la revista Nature sugieren añadir un gen, MICA, a la lista de parámetros implicados en el rechazo a trasplantes renales. El gen, que fue descubierto hace casi 30 años, podría ayudar a reducir el riesgo de rechazo en pacientes con trasplantes renales.
El estudio ha sido realizado por investigadores del Institut National de la Santé et de la Recherche Médicale (INSERM), la Universidad de Estrasburgo y el Hospital Universitario de Estrasburgo, en colaboración con profesionales de la iniciativa francesa TRANSPLANTEX.
Un nuevo rol para el gen MICA
El gen MICA, ubicado en el cromosoma 6 humano, codifica para una proteína de membrana relacionada con la respuesta inmunitaria. Este gen, que presenta múltiples polimorfismos, fue descubierto hace casi 30 años por el Dr. Seiamak Bahram, investigador en INSERM y director del estudio, pero, hasta ahora, no se había demostrado su relación con el rechazo a diferentes trasplantes.
En el trabajo, los autores han demostrado cómo la discordancia entre el gen MICA en un paciente y el de su trasplante renal puede estar relacionada con el rechazo al trasplante. En concreto, esta discordancia es la responsable de la generación de anticuerpos dirigidos a las proteínas del donante, lo que provoca el rechazo al órgano trasplantado.
Los pacientes MICA-discordantes tienen una probabilidad mayor de necesitar un segundo trasplante
Para el trabajo, los autores tomaron datos de 1.356 pacientes de diferentes hospitales que recibieron trasplantes renales entre los años 2002 y 2011: 104 de Montpellier, 17 de Paris-Saint-Louis, 188 de Toulouse, 262 de París-Necker, 304 de Nancy y 391 de Nantes. Los pacientes involucrados en el estudio recibieron seguimiento durante un periodo de entre 6,3 y 12,9 años tras el primer trasplante.
En un primer paso del estudio, el equipo de investigadores analizó los datos del genoma de los pacientes y de sus trasplantes y separó los pacientes en dos grupos: un primer grupo en los que las variantes del gen MICA en el paciente y en el trasplante coincidían (MICA-concordantes) y un segundo grupo en el que estas variantes eran diferentes (MICA-discordantes). Tras separar ambos grupos y analizar diferentes aspectos relacionados con el rechazo del trasplante en cada uno ellos, los autores advirtieron que, en pacientes MICA-discordantes había una cantidad significativamente mayor de retrasplantes (10%) que en pacientes MICA-concordantes (5%).
En el siguiente paso del estudio, los autores analizaron la supervivencia del tejido o órgano trasplantado en cada uno de los 1.356 pacientes durante los años de seguimiento. Los resultados determinaron que, en pacientes MICA-concordantes, los trasplantes presentan tasas de supervivencia mayores a las de los pacientes MICA-discordantes.
Los anticuerpos dirigidos contra las proteínas MICA, un factor de riesgo que aumenta la probabilidad de rechazo
Para demostrar la implicación de MICA en el rechazo al trasplante renal, los investigadores tomaron muestras serológicas de 534 pacientes antes y después del trasplante y analizaron la presencia de anticuerpos dirigidos contra proteínas MICA. Los resultados indicaron que tanto la presencia de anticuerpos dirigidos contra proteínas MICA antes del trasplante como el desarrollo de los mismos tras la intervención aumenta la probabilidad de rechazo del trasplante renal. De entre estas dos situaciones, los autores encontraron que la generación de anticuerpos después de la operación reduce mucho más la supervivencia del trasplante.
Los autores han demostrado, además, que el rechazo mediado por los anticuerpos contra las proteínas MICA presenta un efecto sinérgico con el rechazo mediado por los anticuerpos HLA tanto antes como después del trasplante.
Los resultados de este estudio demuestran la relación entre la discordancia respecto al gen MICA entre paciente y donante, a la vez que sugieren su utilización para predecir y reducir el riesgo a que se produzca un rechazo en pacientes con trasplantes renales. “Tras esta investigación, podemos considerar la inclusión en la práctica clínica habitual de la secuenciación del gen MICA y la identificación de anticuerpos anti-MICA en pacientes antes del trasplante, para evaluar la histocompatibilidad con el donante, y después del trasplante, para mejorar la prevención del rechazo.”, explica el Dr. Bahram.
Futuras investigaciones acerca de este gen podrían ayudar a determinar si influye en el rechazo a otro tipo de trasplantes. “Tenemos previsto estudiar el papel de MICA en el trasplante de otros órganos sólidos, como el corazón, el pulmón y el hígado”, indica Bahram.
Referencia: Carapito R, et al. The MHC class I MICA gene is a histocompatibility antigen in kidney transplantation. Nat Med. 2022 Mar 14. doi: 10.1038/s41591-022-01725-2
Fuente: MICA: A New Immune Response Gene That Predicts Kidney Transplant Failure. Inserm pressroom: https://presse.inserm.fr/en/mica-a-new-immune-response-gene-that-predicts-kidney-transplant-failure/44946/
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